Previamente se intentó dar explicaciones varios de por qué un fic podría no recibir reviews, sin embargo, creo que a veces la respuesta se reduce a una justificación del lector que es bastante sencilla: no sé qué o cómo comentar.
En ocasiones ocurre que se lee un fanfic y simplemente no se cuenta en ese momento con las palabras para expresar los sentimientos provocados, se deja para después, luego se olvida o la pereza nos come. He pasado por eso. Pero también he estado del lado del autor y lo repetiré las ocasiones que deba: uno escribe (o debería, al menos) porque le nace del alma, para acallar cierta inquietud de contar una historia, y está bien.
Publicar es otra historia: se hace debido a que se está buscando obtener algún tipo de respuesta, que si no el caso sería dejarlo en un cuaderno de anotaciones y guardarlo bajo llave en tu gaveta, o en tu disco duro para que se llene de "polvo virtual".
Según Loredi, existen tres tipos de comentarios:
a) El comentario básico: Me gustó / no me gustó / yo leí / gracias por compartir.b) El comentario intermedio: ¿Por qué me gustó? Es decir, ¿qué reacción me causó? Me hizo reír, me hizo reflexionar, me hizo llorar, me pareció caliente.c) El comentario experto: Análisis textual y crítico. Comentarios sobre la caracterización (uso de personajes y qué tan cercanos están al canon), las situaciones (qué tan verosímiles son), los ambientes (qué tan adecuados son, qué tan buenas son las descripciones), las ideas (es original, no la había leído antes, encaja con mi visión de este fandom); comentarios sobre el punto de vista (este personaje es perfecto para narrar la historia desde su perspectiva porque sabe cosas que otros no, o porque no sabe absolutamente nada), el tiempo verbal (la narración en presente es perturbadora, la narración en futuro de este fic suena a profecía), estructura del fic (es innovador que empieces la historia con lo que sería el final, o es un fic clásico que sigue una estructura lineal...). Lo que leí entre líneas (el personaje nunca lo dijo pero por la forma en que se expresó de tal otro personaje, sospecho que tienen un pasado oscuro...).
Ahora, ¿en serio existe algún tipo de excusa para siquiera ser un comentarista básico? No, no hay. ¡Vence el miedo y/o dejadez de manifestarte! No te costará más que unos escasos minutos y quién sabe si hagas sonreír a esa persona que se tomó su tiempo y esfuerzo para escribir algo que te causó algún tipo de emoción.
Gracias a Lilith de Valois y Palabra sobre palabra, ahora podremos tomar en cuenta un Decálogo para el buen comentarista:
Gracias a Lilith de Valois y Palabra sobre palabra, ahora podremos tomar en cuenta un Decálogo para el buen comentarista:
1) Si te ha gustado un texto y quieres dejar
un comentario, hazlo libremente. Por regla general, los autores agradecen los
comentarios.
2) Los comentarios siempre con respeto y con
humildad. Todos cometemos errores, incluso los genios de la literatura o los grandes escritores, cuando entregan su manuscrito en la editorial, tienen siempre a los correctores estudiando su texto. No nos creamos dioses ni
como autores ni como “críticos”.
3) Ten presente que quien publica un texto lo
hace para compartirlo con los demás. Nunca degrades ni denigres por este motivo.
4) Señalando los errores a un autor no solo
aprende él mismo, también aprendemos todos los que leemos los comentarios.
5) Siempre es mejor preguntar que afirmar algo
categóricamente. "Me parece", "¿puede ser qué?",
"quizá", “en mi opinión”, etc. son las formas correctas de indicar
al autor lo que nos parece subsanable. Cualquier sugerencia cae mejor de esta
manera.
6) La calidad literaria así como la sintaxis,
la gramática, la ortografía y la corrección literaria tiene mucho que ver con
la procedencia, formación y práctica del autor. No es lo mismo que un
catedrático escriba mal una palabra a que lo haga alguien que recién se inicia en
las letras. Por esta razón sé SIEMPRE, con este último, benévolo.
7) No somos correctores de estilo, así que no
asumas ese título indebidamente. Si encuentras que uno o varios autores caen repetidamente
en el mismo error, coméntaselo teniendo en cuenta la sugerencia 5.
Resumiendo: humildad, sensatez, educación y
respeto.
Para terminar, de nuevo citaré a la genial Loredi: «Si aún no tienes NADA que decir, deberías reflexionar un poco sobre tus capacidades lectoras, en serio. La lectura sin reacción es una lectura prácticamente vacía y podrías dedicar tu tiempo a ejercicios que sí te generen ideas».
God, me encanta esta entrada, suelo ser de las comentaristas intermedias, más que nada por que a las personas que leo son buenas caracterizando y explayándose, así que con eso no suelo tener muchos problemas.
Gracias por escribir esto! :)